domingo, 13 de mayo de 2012

Desnutrición escolar

Buuuuueeeeenoooooo, parece que ha tenido que ser una niña de 9 años escocesa la que ha tenido que poner la cara roja a los políticos de su país para conseguir movilizar a una sociedad nada empatizada con la importancia de la calidad de la nutrición infantil- no sólo por el interés en el crecimiento de estos pequeños humanos, sino en la influencia de ésta sobre su salud en la edad adulta.

¿Y en nuestro país? ¿A nadie se le pone la cara roja? ¿Cuántos padres, niñ@s, profesores, monitores escolares, hermanos, profesionales de la salud, etc. se quejan e incluso denuncia este tipo de desnutrición en nuestra sociedad? Me atrevería a decir que en nuestra comunidad no es que no exista empatía por la calidad nutricional de nuestros peques, el problema es que la tratamos cuando ya existe el problema básicamente, o bien la prevención va encaminada a educar a la población y no a las empresas encargadas de este tipo de restauración. España y Cataluña concretamente ya hace unos cuántos años que lucha desde la prevención y el tratamiento de alteraciones relacionadas con una mala alimentación en la edad infanto-juvenil. ¿Pero porqué cuesta tanto "tocar" los comedores escolares?

Parece que Martha Payme, con su trending topic mundial también ha movilizado a nuestra prensa consiguiendo polemizar y exponer a nuestra sociedad un secreto a voces. Nuestros peques no comen en el cole verduras, hortalizas ni pescado suficiente, por el contrario sí que abusan de los fritos y las comidas preparadas. Qué casualidad que se prescindan de alimento más caros y se abusen de otros donde el coste es mucho más rentable, así como que se consuman en exceso alimentos fáciles de comer para los ñiñ@s (de su gusto), evitando así excesivos quebraderos de cabeza... Quién no ha envuelto el pescado frío, rebozado y asqueroso en la servilleta de papel del cole y se la ha metido a escondidas en el bolsillo del pantalón para posteriormente tirarla a hurtadillas en el water... glups!

¿Cuánto pagamos de comedor escolar? ¿Cuánto de esos euros están destinados específicamente a un menú con alimentos frescos y productos de calidad? ¿Estaríamos nosotros dispuestos a comer lo que ponen en algunos comedores escolares en un restaurante?

Cabe decir también que existen comedores escolares que hace mucho tiempo que se han unido, o mejor dicho, que nunca han abandonado el "savoir-faire". Bien porque siguen cocinando en sus instalaciones, bien porque están asesorados por caterings profesionales que respetan las necesidades nutricionales y la calidad alimentaria. 

Sea como fuere, el querer es poder! y considero que no hace falta esperar a sufrir un problema para atajarlo, el objetivo sería evitar que éste aparezca.